Fue sin lugar a dudas el hombre de la noche, y su celebración estuvo a la altura de su calidad como jugador y persona. Es que el defensor Edson Álvarez vivió su noche soñada al anotar los dos goles del triunfo a Cruz Azul y le dio el 13° título de su historia al América.

Y para esta ocasión especial, no lo hizo solo. Porque Machín tras el pitazo final y la celebración por la obtención del Apertura, se acercó hasta donde estaban sus padres y su hermano, para fundirse en un emotivo abrazo de felicidad por este logro.

Esta situación ocurre justo en momentos donde sus parientes confirmaron que Álvarez dejará el club tras esta jornada, desconociéndose cuál será su futuro profesional desde el 2019.