El regreso de Nicolás Castillo a las canchas fue un momento sumamente emotivo que se vivió el fin de semana pasado en el partido amistoso en donde América venció a Santos. Sin embargo, hubo un detalle que nadie supo hasta que el propio delantero chileno lo reveló y esto fue lo que Santiago Solari le dijo justo antes de mandarlo al terreno de juego.

“Lo único que me dijo fue que me cambiaron al arquero para que hiciera gol”, dijo el andino, al tiempo de agregar que el agradecimiento que tiene con el indiecito. “También estoy muy agradecido con él porque ha llevado mi situación muy bien. Muchas veces yo me enojaba porque no me dejaban hacer todo, pero hoy en día los entiendo, entiendo cuando me decían que no, al kinesiólogo cuando me decía que no, entiendo al técnico cuando me decía que no podía todavía”.

 

Nico no se olvidó de Miguel Herrera, quien fue el que le dio la oportunidad de venir a jugar a las Águilas y que en cuanto sucedió todo lo relacionado a la trombosis, estuvo pendiente de él junto con su cuerpo técnico con detalles que fueron desde mensajes hasta visitas a su casa, por lo que no se olvida de ellos.

"Agradecido de toda la gente que forma al club, a los que se fueron, a Miguel (Herrera) y su cuerpo técnico que también fueron una parte muy importante en todo esto por traerme a este equipo, siempre voy a ser un agradecido de eso; después de mi situación ellos siempre estuvieron presentes, me visitaron en casa y eso se queda en el corazón”, confesó al canal del Club América en You Tube.

 

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Por otra parte, Castillo compartió como fue el previo al partido tan especial para él, lo que pasó por su cabeza, el apoyo de la gente que estuvo cerca de él como su familia, el personal médico del club y sus compañeros, los cuales lo recibieron con los brazos abiertos cuando se presentó en Coapa para seguir con su rehabilitación.

Pensé desde que me subí al bus de camino al estadio, pensaba en todo momento en lo que viví, en el momento que estuve en el hospital con la incertidumbre de que iba a pasar conmigo; fueron muchas operaciones de urgencia, no sabía si podía vivir, si iba a poder tener mi pierna. Fueron muchas sensaciones que hoy en día agradezco a todos los que estuvieron cerca, a mi familia, a todos los que trabajaron para que pueda estar aquí hoy en día. Recuerdo momentos que estuve en casa sin poder hacer muchas cosas, mi familia siempre me ayudó, la gente del club siempre estuvo cerca de mí, nunca me dejaron solo mis compañeros. El primer día que llegué al club de vuelta de todas las cirugías me acuerdo que me recibieron muy bien, me abrazaron, sentí ese cariño y hoy en día estar en una cancha, demostrándole a mucha gente que cuando te dicen que no vas a poder y no lo vas a hacer, yo soy así, me dicen algo que no y haré todo lo posible para que sea un sí. Muy poca gente creyó que yo volvería a jugar, lo dejé todo en la recuperación, hubo muchas lágrimas, muchas peleas conmigo, con gente del club que hoy en día agradezco porque por ellos estoy aquí, son los momentos que a uno se le vienen a la cabeza. Pero lo más importante es la familia que siempre estuvo contigo aguantándote en las peores”, concluyó.