El ídolo azulcrema rompió el silencio tras hacerse oficial la fecha de su homenaje y aseguró que se está preparando para el partido.

Finalmente Cuauhtémoc Blanco podrá cumplir su sueño de despedirse del futbol jugando con la playera azulcrema en un partido oficial. El América anunció ayer que el homenaje se realizará el 5 de marzo en el duelo ante Morelia por la fecha 9 del Clausura 2016.

Tal como lo había anticipado Ricardo Peláez, el Cuau confirmó que jugará por lo menos media hora y aseguró que se está preparando para hacerlo de la mejor manera.

“A lo mejor puedo jugar 30 o 35 minutos, depende de cómo me vaya sintiendo. He estado entrenando porque no puedo hacer el ridículo, es un partido oficial. Llevo dos semanas entrenando, con esta van a ser tres y la semana que queda”, dijo en entrevista con Fox Sports.

A lo mejor puedo jugar 30 o 35 minutos, depende de cómo me vaya sintiendo

El presidente municipal de Cuernavaca limó sus asperezas con la directiva americanista y llegó a un acuerdo en diciembre pasado para realizar su despedida en el Estadio Azteca.

“Ya se había platicado desde diciembre, pero por compromisos no se había dado a conocer todavía. El primer partido contra Puebla se iba a jugar y ya no se pudo, pero ahora se está dando esa oportunidad con Morelia”, explicó.

“Tuvimos una plática y se llegó a una decisión con el partido y estoy contento con lo que se dio y feliz por este homenaje. Le agradezco a Emilio Azcárraga y a la Directiva por darme la oportunidad de jugar este partido”, agregó.

Del partido no me van a dar ninguna paga y si me lo dieran, lo repartiría en Cuernavaca

Para cerrar, el ídolo azulcrema aclaró que su carrera política no será problema y que no recibirá dinero por su participación con el equipo.

“No hay ningún problema con mi carrera política, me han preguntado y no. Del partido no me van a dar ninguna paga y si me lo dieran, lo repartiría en Cuernavaca porque hace mucha falta. Me encanta ayudar a la gente”, indicó.

“Yo no voy a estar ausente, yo sigo chambeando y en las noches me pongo a entrenar y cuando no hay nada que hacer en la oficina, me pongo a entrenar con el preparador físico, Joaquín Ledesma, a quien le agradezco su tiempo porque como dije, no voy a hacer el ridículo”, concluyó.

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