Tras la derrota de América ante Chivas en semifinales del Clausura 2023, el gran proyecto que había conformado Fernando Ortiz llegó a su fin. En un principio parecía mala idea, ya que no había candidatos que fueran capaces de darle continuidad a su proyecto que seguramente tarde o temprano terminaría con el título.

Sin embargo, luego de una ardua búsqueda de la directiva azulcrema por encontrar al nuevo entrenador del equipo, finalmente se eligió a una de las primeras opciones que sonó para llegar al equipo y que en el poco tiempo que tiene al mando se puede decir que fue la mejor elección.

Con apenas tres partidos oficiales como estratega del equipo, André Jardine ha demostrado que él junto a su cuerpo técnico estaban preparados para tomar un proyecto con la grandeza de América. Cabe mencionar que también en la pretemporada no pudo contar con el plantel completo.

No obstante, con muy poco tiempo al frete del equipo y a pesar de las ausencias, ha dejado una muy buena cara en cuanto a variantes tácticas, algo sumamente en los partidos y que en proyectos anteriores importantes no se había visto.

La posición de Leo Suárez es uno de los grandes descubrimientos de Jardine (Imago)

El claro ejemplo de ello, son los dos últimos juegos de América. Ante Puebla, Jardine contó con Diego Valdés, un jugar vital en el sistema. Sin embargo para el debut de las Águilas en Leagues Cup 2023 ante St. Louis City, el chileno causó baja y el estratega brasileño lo resolvió muy bien con un sistema totalmente diferente con tres mediocampistas, Leo Suárez como mediapunta, y usando a lo laterales para dar amplitud y profundidad al equipo.